viernes, 29 de abril de 2016

MATXOK Y EL TESORO DEL PIRATA PATAPALO

Matxok era una niña a la que le gustaba mucho pasear en bicicleta. Tenía un perrito y solían ir juntos a andar en bici por la playa.
Un día mientras pedaleaban disfrutando del sol, vieron un barco extraño que navegaba a toda velocidad en dirección a ellos.
Era un barco negro, y en lo alto de su mástil se podía ver una bandera negra….. pirata! Matxok pudo ver como en el barco varios piratas cantaban u bebían ron, tiraban algo por los aires para que cayera encima de ellos, era algo brillante, eran…..monedas de oro!
Matxok y su perrito siguieron al barco con la bici por la orilla, y pudieron ver que el bardo entraba en una pequeña playita escondida donde echaba el ancla.
Del barco bajaron una barquita pequeña a la que subieron 4 piratas, bajaron también un cofre muy pesado. Cogieron los remos y remaron hasta la playa.
Allí dos piratas cogieron una pala e hicieron un gran agujero donde metieron el cofre del tesoro, y volvieron a llenar de arena el agujero
Miraron hacia todos lados para comprobar que nadie les había visto, Matxok  y su perro se escondieron detrás de un árbol, y volvieron al barco, donde desplegaron todas las velas y se alejaron a toda velocidad.
Cuando ya estaban muy lejos, bajaron a la playa y entre los dos excavaron allí donde los piratas habían escondido el cofre. Pronto apareció bajo la arena, Matxok lo sacó y lo abrieron a ver que había en su interior.  Se quedaron con la boca abierta: estaba lleno de monedas de oro!!!
Rápidamente Matxok cogió el cofre y corrió hacia la bici, seguida de su fiel perrito, pedalearon con fuerza y pronto llegaron a casa, cerraron la puerta con llave y jadeando buscaron dónde esconder el tesoro. Finalmente lo metieron debajo de la cama y salieron a la calle a jugar al parque.
El resto del día lo pasaron tranquilos y cuando llegó la noche cenaron y se metieron a la cama.
Al día siguiente  Matxok  fue al colegio como siempre, pero en la puerta se encontró con un extraño personaje, iba vestido de pirata, le faltaba una pierna y en su lugar tenía una pata de palo, llevaba un parche en el ojo, y tenía un gran sombrero con una bandera pirata pintado en él.
Matxok se acordó del tesoro que tenía debajo de la cama y empezó a tener miedo:
*- Hola Matxok.- se le acercó el pirata.- con una sonrisa muy fea ya que le faltaban varios dientes.- creo que tienes algo que me pertenece
*- No sé de qué me estés hablando.- dijo Matxok e intentó entrar en el colegio, pero el pirata se puso en medio para que no pudiera pasar
*- Que te parece si te acompaño hasta tu casa?.- preguntó el pirata
Matxok tenía mucho miedo y solo quería que su perrito estuviera con ella.
Caminó delante del pirata hasta casa, mientras que el pirata le amenazaba con su espada.
*- Donde está mi tesoro?- Sé que lo tienes tú, cuando volví a recogerlo y no estaba, seguí las huellas de una rueda de una bici hasta tu casa
*- Está bien, está bien, lo tengo yo, pero aparta esa espada
Matxok entró en la casa y sacó el cofre de debajo de la cama, y se lo dio al pirata. Este comprobó que estuvieran todas las monedas y se sentó en la cama
*- Siéntate.- le dijo a Matxok.- eres una chica muy valiente, ¿sabes?, creo que serías un gran pirata
Matxok se rió, ¿estás hablando en serio?
*- Te gustaría venir conmigo a una aventura pirata? Atacaremos a algún barco, y buscaremos una isla desierta para enterrarlo, ¿Qué te parece?
*- Puede venir mi perro?, no voy a ningún sitio sin él
*- Vale, será un pero pirata!, ¿Qué te parece?
Matxok aceptó encantada de vivir una aventura pirata y se fue con Patapalo dispuesta a ser la mejor de las piratas


Y colorín colorado, este cuento se ha acabado.

jueves, 28 de abril de 2016

Doni, el duende

Doni era un pequeño duende que vivía en el bosque, se había construido su casa dentro de una gran seta blanca y roja.
Sus amigos eran los animalitos del bosque, el conejito blanco, los patitos del río, los pajarillos que vivían en el árbol de al lado…
A todos les gustaba mucho cantar, y se solían reunir al lado del gran rosal rojo, donde se sentaban todos en corro y cantaban juntos.
Otros animalitos solían ir a verles y a oírles, y se sentaban en las piedras y en las ramas de los árboles a escucharles, eran ardillas, pajaritos, mariposas, saltamontes…. Todos aplaudían con ganas cuando terminaban de cantar
Después iban todos a jugar entre los arboles.
*- Porqué no jugamos al escondite?.- propuso un día Doni- me la quedo yo
Apoyó la cabeza contra un árbol y empezó a contar has 10
Todos corrieron a esconderse y Doni empezó a buscarles. Uno a uno fue encontrando a todos, cada vez que veía a uno corría hasta el sitio donde había contado
*- Por conejito!, por patito!
Sin embargo no terminaba de encontrar a la ardilla
*- Tilla, tilla!.- le llamó Doni.- sal ya, me rindo…!!
Sin embargo la ardillita Tilla no aparecía, así que empezaron a buscar entre todos mientras la llamaban a gritos.
*- Estáis buscando a una ardillita de color rojo?.- preguntó un águila que paseaba por el cielo
*- La has visto?
*- Si, pero muy lejos de aquí, iba corriendo hacia el lago. Parecía que tenía problemas, como si estuviera buscando a alguien.
*-Vamos.- propuso Doni.- tenemos que ayudarle
Doni se subió encima de conejito , y los dos echaron a correr por el bosque buscando a Tilla. El patito no fue porque era demasiado lento para correr por el bosque.
Doni y el conejito fueron corriendo en la dirección que les indicó el águila, pronto encontraron las huellas de la ardillita, y les resultó muy fácil seguirlas.
De repente las huellas desparecieron, estaban en la entrada de una gran cueva, era como si la ardiliita hubiera entrado allí, pero a Doni le daba miedo, ¿y si era la cueva de algún gran oso?
*- Tenemos que entrar Doni, Tilla, puede estar en peligro
*- Está bien, entraremos despacito sin hacer ruido,
Conejito con Doni subido sobre su espalda entró de puntillas, y dio paso tras paso muy despacito, comprobando bien dónde ponía los pies.
No se oía nada, y cada vez estaba mas oscuro
*- Pssss, psssss., Doni, Conejito.- les llamó una voz muy bajita
*- Quien eres?
*- Soy yo la luciérnaga, he venido a ayudaros, puedo ir con vosotros e iluminaros el camino
*- Ohhh!, muchas gracias, vamos…
Los tres siguieron su camino en silencio, hasta que a lo lejos desde el fondo de la cueva les llegaron unos gritos
*- Suéltame, déjame salir!!!

Era la ardillita, los tres corrieron hacia ella y se escondieron tras una gran piedra para saber qué estaba pasado.
Vieron a la ardillita metida en una jaula, y al lado suyo una feísima bruja daba vueltas con una gran cucharon a lo que parecía sopita en una gran cazuela.
*- Cállete ya!!, no seas pesado!!, nadie te va a oir, y me está molestando todo el ruido que haces. Cuando termine de cocinar esta pócima, te le beberás y te convertirás en un dragón de dos cabezas, ja, ja , ja ¡!! Si funciona,convertiré a todos los animalitos del bosque en dragones, será el bosque de los dragones, y todos me obedecerán, ja, ja, ja!!!
Tilla, la ardillita seguía gritando y sus tres amigos empezaron a temblar de miedo cuando oyeron los malvados planes de la bruja
*- Que hacemos?.- preguntó el conejito
*- Tenemos que destruir esa cazuela con la pócima y liberar a la ardillita
*- Pero como?
Doni el duende que era el mas listo se puso a pensar, necesitaban un plan!

Doni y Tilla, se escondieron detrás de unas rocas e hicieron un gesto a conejito para que soltara la escoba, así o hizo, la dejó caer al suelo y salió corriendo para que la bruja no le persiguiera.
Esta, la bruja , entró en su cueva con la escoba mientras murmuraba muy enfadada, tenía que seguir cocinando la pócima y hacer el experimento del dragón de las dos cabezas.
*- Ven Tilla, vamos s intentar mover estas piedras para cerrar la entrada de la cueva y que la bruja no pueda salir!!
Entre los dos empujaron, pero las piedras eran demasiado pesadas para ellos, pero vino corriendo conejito que se había encontrado con un oso amigo e iban a ayudarles a cerrar la entrada. El oso que era muy fuerte, cogió con solo una mano una gran roca y cerró la cueva dejando a la bruja encerrada.
El grupo de amigos volvió riéndose muy contentos muy contentos, hacia su casita, la luciérnaga y el oso también y para celbrarlo decidieron hacer una comilona de frutas a la que invitarían a todos sus amigos

Y colorín colorado, este cuento se ha acabado!!







miércoles, 27 de abril de 2016

El dinosaurio que no tenía otro igual


Había una vez en un bosque muy, muy lejano, donde los arboles eran muy grandes y muy altos, había un río muy azul y la hierba era alta fresca, y muy muy verde.
Era el bosque de los dinosaurios.
Allí había dos dinosaurios de cuello largo, los argentinosaurios; había dos grandes Rex con su enorme boca y sus poderosos dientes; también había grandes serpientes, dos.
Sin embargo había un dinosaurio que andaba agachadito, y tenía la espalda y la cola llena de pinchitos, que se llamaba Anquilosaurio, pero sólo había uno. El pequeño Anquilosaurio se lo pasaba e grande con los demás dinosaurios, jugaban todos en el bosque a correr, al escondite…,
Un día cuando se hizo de noche, el pequeño dinosaurio de pinchitos no podía dormir y se levantó a dar un paseíllo por el bosque, se encontró con la luna, estaba grande y muy redonda alumbrando todo el bosque desde el cielo.
*- Hola pequeño dinosaurio, ¿dónde vas a estas horas de la noche?
*- Hola Luna, no podía dormir y me he puesto a pensar en porque en el bosque no hay otro dinosaurio igual a mi
*- Pero si que lo hay!.- dijo la luna.- lo que pasa es que tu no lo has visto nunca, no vive en el bosque como vosotros, sino que vive en un castillo, muy lejos de aquí. Cuando era muy pequeñito, unas bruja lo capturaron y s lo llevaron a su castillo, allí lo tienen atado por una correa en la calle, y grita y llora mucho.
*- Eso no puede ser.- gritó el pequeño anquilosaurio.- debemos rescatarlo, ¿donde está el castillo?, mañana por la mañana despertaré a mis amigos y nos iremos a salvarlo.
*- Está muy lejos, mira, habéis de cruzar todo el bosque, , luego cruzad el lago, después habéis de subir una montaña y cuando bajéis por el otro lado habrá una playa. Si mirais desde ella el mar, veréis una isla a lo lejos, en ella está el castillo de las brujas. Tened mucho cuidado que son muy malas.
El pequeño dinosaurio se fua a dormir y a la mañana siguiente despertó muy pronto a todos sus amigos. Les contó lo que le había dicho el día anterior la Luna, y se pusieron a organizar la excursión.
*- Necesitamos llevar comida y mantas pues tardaremos varios días en ir y volver.- dijo el anquilosaurio.- tu, el argentinosaurio de cuello tan largo, llevarás una bolsa con mantas para todos, y tu el fuerte Rex, llevarás una mochila con bocadillos para todos. Yo iré el primero, me seguis en fila, y la serpiente será la última
Empezaron la marcha, y tras mucho caminar llegaron a un gran lago:
*- Cómo vamos  a cruzar es? preguntó preocupada la serpiente
*- Necesitamos hacer una balsa.- les dijo el dinosaurio pequeño. A ver Rex, tu irás al bosque a por troncos de árbol, Argentinosaurios le ayudaras al Rex a sujetarlos todos seguidos uno pegadito al otro, y la serpiente los atará con su cuerpo como si fuera una cuerda.
Todos trabajaron juntos y en muy poco tiempo terminaron la balsa y cruzaron el lago.
*- Que os parece si pasamos aquí la noche?, podemos acercarnos a esos árboles y taparnos con las mantas, pero primero cenaremos algunos bocatas, no os comais todos, que lleguen para mañana.
Cuando terminaron de cenar guardaron los bocatas sobrantes en una bolsita colgada del arbol y se taparon para dormir.
A la mañana siguiente, lo primero que hicieron fue ir a por la bolsa de los bocatas, pero,...estba vacía!!!
*- Quien ha sido?.-
*- Quien ha sido?.- preguntó malhumorado el Rex, mientras rugía con el disgusto
*- Yo no
*- Yo tampoco
*- A mi no me miréis……
De repente oyeron un ruido extraño tras unas rocas, era como un ronquido, y sin hacer ruido se dirigieron allí.
Un gran oso, dormía con la boca abierta, y alrededor suyo estaba lleno de las migas de los bocatas que se había comido!!!
*- Oso!!!!.- gritaron
*- Ehhh?, que?, que pasa????
*- Te has comido  nuestro desayuno!!!
*- Bueeeeno, es que, …. Es que…., estaba tan rico, y yo tenía tanta hambre……. Pero ya no os lo puedo devolver, está dentro de mi estómago, lo siento……
*- Vas a venir con nosotros en nuestra excursión!!!.- le dijo fiero el Rex, y cuando tengamos hambre serás tú el encargado de conseguir la comida
*- Vaaaaleee! Que pesados.- pensó el oso, pero obedeció a lo que le mandaba el REX
Todos los dinosaurios, la serpiente y el oso, llegaron a la montaña, y empezaron a subir, cuando llegaron arriba estaban muy cansados y decidieron comer y pasar la noche allí.
Por el camino habían pasado por al lado de todo tipo de frutales, manzanos, perales, plataneros, y le enviaron al oso con una gran bolsa para que la llenara de fruta.
Se sentaron todos en corro para cenar y se taparon bien para dormir juntitos.
*- Acordaros de guardar bien las frutas para mañana

A la mañana siguiente el Rex lo primero que hizo fue ir a ver la bolsa de la Fruta, y con horror comprobó que estaba vacía::
*- Quien ha sido??.- gritó muy pero que muy enfadado

Todos se encogieron de hombros…. Yo no
En ese momento dos grandes gaviotas sobrevolaron por encima de sus cabezas riéndose:
*- Hemos sido nosotras, lo sentimos, pensábamos que no era de nadie, y ahora no os lo podemos devolver, está dentro de nuestro estómago….
*- Vais a venir con nosotros en nuestra excursión!!!.- les dijo fiero el Rex, y cuando tengamos hambre seréis vosotros los encargados de conseguir la comida
*- Vaaaaleee! Que pesados.- pensaron las gaviotas , pero obedecieron a lo que les mandaba el REX
El grupo terminó de atravesar la montaña y llegaron a una playa, estaban cansadísimos, y decidieron quedarse a dormir al lado de unas grandes rocas en la misma playa,
*- Vosotras.- ordenó el Rex a las gaviotas.- vais a acercaros al agua y a pescar todos los peces que podáis para que podamos cenar. Tomad esta bolsa y la llenais
Las gaviotas obedecieron y en poco tiempo llenaron la bolsa de peces. Hicieron un fuego, y fueron asándolos y comiéndolos entre todos
*- Dejad alguno para desayunar mañana ¿eh’
Y se fueron a dormir
*- Vaaaaleee! Que pesados.- pensó el oso, pero obedeció a lo que le mandaba el REX
Todos los dinosaurios, la serpiente y el oso, llegaron a la montaña, y empezaron a subir, cuando llegaron arriba estaban muy cansados y decidieron comer y pasar la noche allí.
Por el camino habían pasado por al lado de todo tipo de frutales, manzanos, perales, plataneros, y le enviaron al oso con una gran bolsa para que la llenara de fruta.
Se sentaron todos en corro para cenar y se taparon bien para dormir juntitos.
*- Acordaros de guardar bien las frutas para mañana

A la mañana siguiente el Rex lo primero que hizo fue ir a ver la bolsa de la Fruta, y con horror comprobó que estaba vacía::
*- Quien ha sido??.- gritó muy pero que muy enfadado
Todos se encogieron de hombros…. Yo no
En ese momento dos grandes gaviotas sobrevolaron por encima de sus cabezas riéndose:
*- Hemos sido nosotras, lo sentimos, pensábamos que no era de nadie, y ahora no os lo podemos devolver, está dentro de nuestro estómago….
*- Vais a venir con nosotros en nuestra excursión!!!.- les dijo fiero el Rex, y cuando tengamos hambre seréis vosotros los encargados de conseguir la comida
*- Vaaaaleee! Que pesados.- pensaron las gaviotas , pero obedecieron a lo que les mandaba el REX
El grupo terminó de atravesar la montaña y llegaron a una playa, estaban cansadísimos, y decidieron quedarse a dormir al lado de unas grandes rocas en la misma playa,
*- Vosotras.- ordenó el Rex a las gaviotas.- vais a acercaros al agua y a pescar todos los peces que podáis para que podamos cenar. Tomad esta bolsa y la llenais
Las gaviotas obedecieron y en poco tiempo llenaron la bolsa de peces. Hicieron un fuego, y fueron asándolos y comiéndolos entre todos
*- Dejad alguno para desayunar mañana ¿eh’
Y se fueron a dormir
A la mañana siguiente todos corrieron a ver la bolsa de los peces, y otra vez había desaparecido la comida!!!
*- Quién ha sido ¿?.- rugió el Rex, enfadadísimo, ¿oso?
*- Yo no!!
*- Gaviotas?
*- Nosotras tampoco!!!
*- He sido yo.- dijo una voz detrás de ellos.- qué buenos estaban, y ahora tengo la tripita tan llena!!!!
Se dieron la vuelta y vieron un delfín nadando boca arriba y tirando agua por boca
*- Y ahora que hacemos?.- preguntó el argentinosaurios.- tenemos que cruzar este mar, con el estómago vacío tardaremos muchísimo
*- No.- dijo el Rex.- aún enfadado.- nos llevará el delfín.- hasta aquella isla que ves allí delante, donde está un gran castillo
*- Ni hablar, yo allí no voy .- dijo el delfín.- allí viven unas brujas muy malas que dan mucho miedo y además se escuchan unos gritos de pena horrible
*- Ese es el anquilosaurios. Gritó el dinosaurio mas pequeño.- tenemos que rescatarlo!,. es él que llora. Tienes que llevarnos!!

Al final el delfín aceptó, se colgaron todos de su cola, y les arrastró por el mar en menos de dos minutos a la isla.

Se acercaron despacito, sin hacer ruido, de puntillas hasta la puerta de la muralla tras la cual estaba el castillo de las brujas malas.
El anquilosaurio atado en el interior del patio, lloraba y gritaba, muy triste de estar siempre atado y encerrado.
*- Por aquí no se puede entrar, vamos por la parte de atrás a ver si es mas fácil atravesar la muralla
Allí, en la parte de atrás había un sitio donde la muralla no era tan alta:
*- Tengo un plan.- dijo el pequeño dinosaurio.- el argentinosaurios con us gran cuello me ayudara a subir a lo alto de la muralla y pasaré al otro lado. Tú serpiente, ven conmigo, tu puedes reptar, arrastrarte  por  la muralla hasta cruzar al otro lado. Soltaremos la cuerda del pobre dinosaurio y echaremos a correr a la puerta. Vosotros estad preparados para salir corriendo a la playa
Dicho y hecho; se acercaron a la parte delantera del castillo donde estaba atado el otro dinosaurio y haciéndole un gesto con el dedo sobre los labios le dijeron que no hiciera ruido
*- Si tu eres como yo!!!
*- Si, y hemos venido a rescatarte, te llevaremos con nosotros al bosque de los dinosaurios
*- En serio?.- Oh, que bien!!!
Pero cuando estaban soltando la cuerda de su cuello, el dinosaurio estornudó haciendo mucho ruido y las brujas se asomaron corriendo a la ventana a ver qué pasaba…
*- Mirad!!!.- otro dinosaurio y una serpiente nos están robando nuestro dinosaurio!!, vamos!!!
Las tres brujas montaron en sus escobas voladoras y volaron a toda velocidad hasta donde se encontraban los dinosaurios, sin embargo la serpiente  estiró hacia arriba su larga cola y empezó a sacudir con ella a las escobas
*- Ahhhhh, socorro que me caigo, estáte quieta!!!, y la primera bruja cayó al suelo, dándose un fuerte golpe en el culo.
La serpiente se enrollo sobre la bruja queta que le hizo daño
*- Ayyy, mi culo!!! Suéltame que me haces daño!!! devuélveme mi escoba!!!
*- Solo si nos dejais en paz salir del castillo con el dinosaurio
*- Está bien, está bien, iros de una vez!
Todos echaron a correr hacia el mar, donde les esperaba el delfín que les ayudó a llegar a la playa
Una vez allí corrieron hacia su bosque  donde nunca mas volvieron las brujas a molestarles
Y colorín colorado, este cuento se ha acabado