miércoles, 15 de junio de 2016

EL CHIMPANCE MORADO Y EL GRAN GORILA

Había una vez  un bosque muy lejano, donde todos sus habitantes eran gorilas y chimpancés. Allí no había personas, ni otro tipo de animales tampoco.
Los chimpancés y los gorilas no vivían en los árboles, sino que se habían construido casas, con las mismas comodidades que tenemos los humanos, con camas, televisores….
En el bosque había un gorila que era el mas grande, y mas fuerte, era el rey. Vivía en un castillo en el centro del bosque, y solía estar sentado en un gran trono rojo . Todos los chimpancés del bosque le tenían que llevar todos los días un montón de regalos.
Un chimpancé le llevó una cesta con plátanos, otro le llevó una bolsa de gominolas. El mono mas pequeño le llevaba una tarta de chocolate….
El gran gorila sin levantarse de su trono iba recogiendo y examinando todos los regalos, los que mas le gustaban eran los de comida y chuches.
Sin embargo, había un pequeño chimpancé de color morado que nunca le llevaba nada al rey gorila
El rey gorila, mandó a sus dos mejores soldados, dos gorilas muy fuertes muy fuertes, a la casa del chimpancé morado para que lo apresaran y lo llevaran ante él.
Los soldados gorilas encontraron al chimpancé morado tumbado en el sofá de su casa viendo la televisión.
*- Tienes que venir con nostros.- le dijeron y le ataron las manos y le llavaron al castillo, hasta el rey gorila
El rey gorila con su bastón de mando se puso de pie y muy enfadado preguntó:
*- Porque no me traes nunca ningún regalito?, ya sabes que todos los días, todos los habitantes del bosque me tenéis que traer algo.
*- No te traigo nada majestad, porque no me parece bien que tu estés todo el día sentado sin hacer nada, y nosotros tengamos que trabajar para traerte la comida. Levántate y hazlo tu mismo
El rey se enfadó muchísimo y le dijo:
*- A mi no me puedes hablar así!, soy tu rey!! Como castigo estarás encerrado dos días en los calabozos sin nada para comer, y así aprenderás a ser mas obediente.
Los soldados gorilas le llevaron por unas escaleras hasta unas jaula, y le metieron en una de ella, le dieron tan solo una botella de agua.
El chimpancé morado pensó que ya que tenía que estar allí encerrado, aprovecharía para dormir un poco , sin embargo empezó a oír un ruidito muy molesto que no le dejaba dormir. Se levantó y miró a los lados, cerca de su jaula vio otra donde estaba encerrada una chimpancé.
 *- Hola, quien eres?
*- Soy un chimpancé verde, el gran gorila me ha encerrado durante dos días como castigo por no traerle nada de comer
*- Oh!, a mí me ha pasado lo mismo
Los dos monos se pasaron toda la noche hablado juntos, de dónde vivían, de lo que les gustaba para comer, a qué les gustaba jugar….
Cuando pasados dos días los soldados gorilas fueron a buscarles para soltarles, los dos chimpancés se habían hecho muy amigos
Decidieron que irían a vivir juntos a una gran casa que se hicieron a la salida del bosque, y se siguieron negando a llevar al gran gorila su comida.
Cada poco tiempo, los soldados gorilas les encerraban castigados, pero cada vez que estaban allí, hacían un nuevo amigo a quien también habían llevado  a las jaulas.
Cuando salían de su castigo, todos se iban a vivir juntos, y llegó un momento, en que había mas chimpancés con el mono morado que con el gran gorila.
En ese momento ya eran tantos los chimpancés que no llevaban regalitos al gran gorila, que no había jaulas suficientes por lo que no podía ser castigados, así que todos se negaron a llevarle nada de comer.
El gran gorila tuvo que levantar su enorme culo del trono, y empezar a trabajar pos si mismo buscando su propia comida, y se dio cuenta que era divertido y que le gustaba recoger frutas de los árboles y cocinar …


Y colorín colorado, este cuento se ha acabado

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